Un escaparate atractivo es sin duda un factor potencial a la hora de exponer un negocio al público. Las primeras impresiones son vitales, por eso debemos escoger el vidrio de nuestro escaparate cuidadosamente.
¿Por qué vidrio?
El vidrio es un material que se asocia a la elegancia y la transparencia, al mismo tiempo que te permite adaptarlo a todo tipo de fachadas y diseños.
Instalando un vidrio de seguridad adecuado, puede conseguir una gran protección en su negocio, contra robos o contra las inclemencias del tiempo.
El vidrio no sólo es un excelente aislante del frío o del calor, sino también aísla de forma acústica. Instalar escaparates de vidrio además ayuda a ahorrar, tanto en luz como en los gastos de limpieza, a diferencia de otros materiales.
¿Qué tipo de vidrio?
La elección de vidrios de escaparate depende del lugar donde se van a instalar y del tipo de negocio. Lo más común es usar vidrios laminados, siendo estos los más seguros y resistentes.
Es necesario informarse de la normativa de seguridad, ya que según el tipo de negocio, los vidrios tienen que cumplir unos requisitos. Por ejemplo, los escaparates de joyerías deben ser resistentes a un ataque manual (entre 30 – 50 golpes de maza).
En casinos, bancos o centros comerciales, deben ser resistentes a balas e incluso a explosiones.
Cada vidrio de seguridad está pensado para cumplir una función, por eso hay que informarse antes de tomar una decisión:
- Vidrio antirrobo: preparados para impactos contundentes de mazas, palancas, etc.
- Vidrio de seguridad física: pensado para resistir a la posible caída de personas, impactos, etc.
- Vidrio antibalas: contra impactos de armas ligeras.